Ayer se celebró el campeonato de Euskadi de duatlón sprint en Ermua, carrera cerca de casa en la que el año pasado me lleve la victoria. Este año en principio no entraba en los planes hacerla ya que estamos en una semana de carga entrenando pero como íbamos a ir con los chavales del equipo, decidí tomar parte.
No sé por donde empezar a contar mi batallita de ayer después de ver la carrera espectacular que ha hecho Eneko Llanos durante toda nuestra noche en el Ironman de Melbourne pero bueno ,nuestra carrera no deja de ser una batallita llena de esfuerzos y podiums también. Jeje
Dos cadetes, cuatro júniors, un sub 23 y dos absolutos llegábamos a Ermua a eso de las 15:30 con mucha ganas, muchas ilusiones y nerviosos. Todos los pasos pre-carrera, todos de aqui para allà, recogida de la bolsa del corredor, preparación de dorsales, colocación en boxes del material y calentamiento. A mi me dieron el dorsal 1 por la victoria del año pasado, bonito dorsal, la primera vez que me lo daban y las chicas del equipo hasta el dorsal 4 sucesivamente. Nosotras empezábamos a las 17:00 y los chicos 15 min más tarde así que poco a poco nos fuimos acercando hacia la salida.
Nos juntamos un grupo majo de chicas, muchas caras conocidas, yo me fijo en Lourdes, ganadora de Oñati y en Ainara ganadora de Eibar, pienso que son las que más fuerte saldrán. Empezamos y yo cojo la cabeza de carrera, parece que nadie va a atacar y yo poco a poco me voy abriendo un hueco cada vez más grande, empiezo a pensar en la transiciòn y en escaparme en bici. Mientras cojo la bici en boxes intento recuperar un poco el esfuerzo, me subo, empiezo a coger velocidad y me encuentro una caravana de coches, parón puff, paso,cojo ritmo y la verdad que no me encuentro pletórica pero bueno tenia un poco de ventaja respecto a la de detrás y la idea sigue siendo irme sola. Cuando estoy llegando a Mallabia veo a Lourdes acercándose y la carrera empieza a cambiar, en el repecho que sube a la iglesia, repecho durísimo me coge. Le veo muy fuerte, me ha cogido con facilidad y va a más. Hacemos a partir de entonces la bici juntas y por detrás la tercera viene lejos. Damos la segunda vuelta al circuito y esta claro que nos la vamos a jugar en el tercer segmento. Era la primera vez que me iba a jugar así el primer puesto, siempre me he bajado de la bici con el puesto más o menos decidido o en alguna carrera larga he ido recortando o me han recortado poco a poco pero nunca así como ayer, bajarnos la primera y la segunda juntas y a ver que pasa. Sin querer ser negativa analizaba la situación y pensaba que no iba a poder, había corrido bien el primer segmento pero luego en bici no había estado fina y pensaba que seguramente el cansancio acumulado en la semana estaba apareciendo, también le sumaba que estoy premenstrual y le veía a ella con gestos y actitud tan fuertes que pensaba que ella sería superior. Salimos a correr, fortísimas, en poco rato es increíble todo lo que se te puede pasar por la cabeza, desde los pensamientos más débiles a los más fuertes, analizaba mi actitud en esos momentos, analizaba mis fuerzas, recordaba alguna que otra sensación entrenando, pensaba en el grupo que habíamos ido de como les estaría yendo, en los ánimos de la gente…, lo que dan de sí 2,5 km. Y corriendo y corriendo le voy dejando y llego a meta primera y muy contenta.
Poco a poco van llegando todos los de equipo, cansados pero muy contentos. Cada uno en su categoría había ganado su trofeo y las chicas además habíamos ganado por equipos, que buen rato pasamos. Y para despedirnos durante la Semana Santa nos fuimos a cenar por ahí y a seguir contando batallitas.